Sinceramente creo que el mundo se divide entre los que leemos mucho, y los que no leen nada. Cuando alguien me dice que no lee, me entran ganas de darle el pésame. Y es que la lectura permite entrar en otras mentes, viajar, aislarse de los demás, encontrarse con uno mismo, ganar en cultura y aprendizaje.
Para mi entrar en la Biblioteca Nacional y lo digo con el máximo de los respetos, siendo que soy una persona con fe religiosa, es como entrar en una catedral del ser humano.
Pensemos en el esfuerzo, en la creatividad, en la imaginación, en lo que se ha vivido para alcanzar a tener tanto conocimiento, tanta pasión, tanto diálogo, tanto debate.
El libro, es un magnífico amigo que se deja en una página y se retoma en la misma.
Pocos momentos más cálidos, más tiernos, más de vínculo que la lectura de un cuento a un niño, que abre los ojos con atención ilusionada.
Y nada más emblemático que una mujer o un hombre muy mayores que con esas manos ya delgadas surcadas por sus venas sostienen un libro y si uno se fija tras su mirada cansada chisporrotea la curiosidad infantil.
Estimados jóvenes no dejéis de leer.
Estimados jóvenes no dejéis de leer. Estimados padres y educadores entended que un libro es mucho más que una herramienta y que un instrumento para educar.
En nuestro centro terapéutico residencial RECURRA GINSO muchos de los más de 1100 jóvenes que han pasado por Brea de Tajo me dicen: Javier, yo aquí me he aficionado a leer, antes no lo hacía.
Y es que en nuestro centro terapéutico no hay teléfonos móviles y también cuando se sanciona se indica que se mantengan en su habitación y eso sí pueden leer.
Me alegra sobremanera saber que contribuimos al amor a la lectura porque estamos ampliando la visión existencial de cada persona.
Quizás, alguno de ellos acabe siendo escritor.
Parte de mi vida la he dedicado a escribir pero aun más mucho más a leer y estoy sumamente agradecido.
Naturalmente que yo sigo siendo un defensor del libro en papel, pero lo importante es leer.
Jamás me aburro aunque la partida del avión se demore muchas horas pues tendré siempre un buen libro que disfrutar.



